miércoles, 10 de agosto de 2011

Marcos Paz: "Un ciudadano socialmente normal"

(AW) "Las personas que tendrían que cuidarte te maltratan, física y verbalmente y esto es continúo. No hay atención médica y estoy limitado a expresarme, pero no todo es tan malo, es peor el supuesto "programa de tratamiento individual". Un tramo del intenso relato de vida del compañero César desde el penal conocido como "Guantánamo".

Mi historia de vida es un poco peculiar y similar a la de muchos ciudadanos del país, vengo de una familia numerosa y desde chico me enseñaron a ser una persona honesta, aunque cuestan más las cosas, me siento muy bien por interactuar de esta manera y siempre voy a creer que si todos fuésemos más honestos y flexibles nuestra sociedad y realidad sería diferente.
Comencé a trabajar de desde muy chico y hasta mi último día de libertad fue igual. Tengo una familia hermosa, va pertenezco a ella, y estoy orgulloso de los 5 integrantes que la componen, 4 hijos maravillosos y una excelente esposa. Era todo muy normal hasta que los momentos económicos del país empezaron a ¿desventurarse? Y acompañados de honestidad y negocios malos mi situación comenzó a no ser tan sólida lo cual no fue bueno para el bienestar de mi familia, estaba en juego el sacrificio de tantos años y el porvenir de todos, si algo salía mal le fallaba a las personas que más amo en el planeta.
Probé e intenté muchas cosas, pero como en todo en la vida, si estás bien sos el mejor pero si no estás pasando buenos momentos es difícil encontrar una mano amiga. El tiempo pasó y comencé a entender que tendría que sobrevivir en lo que mejor me desenvolvía, el rubro automotor y me inscribí en varios cursos de capacitación. Hoy en día soy técnico en: audio, electricidad, electrónica y climatización automotor, algo de lo cual estoy muy orgulloso por ser una vocación. Igual el saber parece no ser un requisito para una oportunidad laboral real y el tiempo pasa y la vida es tan corta o por lo menos así lo parece, sin darme por vencido continué siendo feliz junto a mi familia.
En el año 2009 conocí a un cliente el cual por apariencia tenía una posición económica sólida y me propuso una changuita como quien dice, dos veces por semana a 250$ cada una, pero era algo no legal, y me encontré en medio de una decisión difícil, el fin justifica los medios, tenía que ahorrar para el cumpleaños de 15 de mi hija y el de 18 del mayor, que sería en este año con 4 meses de diferencia; se podrán imaginar, los salude desde "acá", jamás pensé en hacerles tanto daño, pero estoy orgulloso de la entereza con la que enfrentamos esto día a día.

"El peor lugar"
Hoy estoy condenado a 5 años y 6 meses por descargar mercadería. Esa es una parte de mi vida, la otra es muy pero muy difícil, me encuentro en el peor de los lugares para alojar detenidos, aunque se supone que te alojan según reincidencia o capacidad de reinserción pero no es así. Las personas que tendrían que cuidarte te maltratan, física y verbalmente y esto es continúo. No hay atención médica y estoy limitado a expresarme, pero no todo es tan malo, es peor el supuesto "programa de tratamiento individual". No se "ajusta" a ninguno de los parámetros establecidos en la ley y cuando en realidad tendría que ser "progresivo" es "retroactivo", no nos evalúan como seres humanos, nos tratan en forma despectiva y lo que más me hace daño es exponer a mi familia a estos vejámenes, porque igual que al interno a la familia del mismo se la trata inhumanamente y en vez de ser un "alojamiento" se convierte en un lugar de tortura física y mental , su única función es romper los lazos y el vínculo familiar. Todo eso aparte de ser injusto es frustrante por que ellos son los "profesionales" y al "evaluarme" tan superficialmente, destruyen la esperanza de sentirme una persona "socialmente aceptada" y orgulloso de generarme la oportunidad de estar en el medio "libre". Ya hace 14 meses que estoy dentro del programa "calificado" y todavía no entiendo como sigo "calificado mal". Quiero sentirme una persona "normal" y no tanto para recuperar mi libertad sino para sentirme que sigo siendo un ciudadano normal... social y personalmente.

Devolución
Esta muy bueno animarse a escribir y a contar con nuestras palabras lo que sentimos y pensamos, esta bueno que esto sirva para re pensar desde donde hablamos y desde donde nos hablan quienes nos hablan. Pensar a quienes nos dirigimos, que queremos decirle a esas personas e ir leyéndonos para mejorar la forma del mensaje y llegar a más....
Esta buena la intencionalidad de la historia, esta bueno que deja ver sutilmente lo inhumano y se entiende a donde apunta. Hicimos algunas correcciones como acentos o donde faltaba o sobraba una coma.
Cesar Gómez -Modulo II - pabellón 2

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