TRASLADOS COMPULSIVOS

La Coordinadora Anticarcelaria repudia el traslado compulsivo que

sufrieron cerca de 80  personas privadas de la libertad alojadas en el Ex-CROM (Córdoba), el

viernes 28 de septiembre por la mañana, a las instalaciones del

Establecimiento Penitenciario de Montecristo.

Las razones obvias por las que nuevamente las presas y los presos son

tratados como ganado están emparentadas con el lobby inmobiliario y

los negociados de los grupos económicos de la construcción, en plena

asociación con el gobierno de De La Sota.

Montecristo, a diferencia del Ex-CROM –emplazado a pocos metros del

centro de la ciudad-, se encuentra ubicado a 25 kilómetros de la

ciudad. El régimen obligado a cumplir por las personas presas en el

Ex-CROM (actualmente encerrados en Montecristo) es denominado “Régimen

Semi-Abierto”. Las personas encarceladas tienen que hacer conducta y

cumplir rigurosos requisitos para acceder a esta etapa de la condena.

Por ello, tienen la facultad de salir a trabajar, visitar a sus

familias, asistir a la Universidad, participar en proyectos educativos

no formales, etc., variando las condiciones según la situación de cada

persona.

En Córdoba, los De La Sota y la oposición ven con buenos ojos la

expansión inmobiliaria, la expulsión de sus tierras de habitantes de

asentamientos y villas urbanas, el negociado con los terrenos fiscales

para la capitalización de los terrenos... Ya pasó con el traslado de

los centros penitenciarios a Bower y ahora le llegó el turno al

Ex–CROM.

Sumado al régimen de explotación que sufren los presos y las presas

(igualable solamente con la época de la esclavitud), las condiciones

de hacinamiento, las reiteradas torturas y los malos tratos, el

decadente sistema de atención médica, y los códigos mafiosos que

imperan en los centros de encierro de Córdoba, las personas se verán

obligadas a desembolsar grandes sumas de dinero para trasladarse a los

sitios que su régimen semi-abierto permita. Las familias se verán

impedidas de visitar con la misma frecuencia que antes a sus

familiares presos.

Sumado a esta aberrante situación, la Coordinadora Anticarcelaria

advierte que la Unidad Penitenciaria de Montecristo ya tenía cubierto

su cupo y las celdas donde las personas están obligadas a dormir

son diminutas para la cantidad de gente que tendrá a partir de ahora

esa unidad penal.

 Las víctimas silenciadas han sido las personas encarceladas y, una vez

más, el Estado pisotea y desconoce sus derechos.

EXIGIMOS LA INMEDIATA RESTITUCIÓN AL EX CROM, DE LAS PERSONAS TRASLADADAS.

COMO ASÍ TAMBIÉN MEJORAS EN SUS CONDICIONES DE ENCIERRO.

EXHORTAMOS A LAS AUTORIDADES CORRESPONDIENTES, PERMITIR EL INGRESO A LAS CÁRCELES CORDOBESAS DE ORGANIZACIONES DE DERECHOS HUMANOS INDEPENDIENTES DEL GOBIERNO NACIONAL, Y PROVINCIAL

COORDINADORA ANTICARCELARIA